Una colección de 28 piezas con pinturas y azulejo esmaltado conforma Romper y Recomponer, del artista guatemalteco Juan Antonio Fernández, que explora una nueva afición iniciada gracias a la arquitectura.
Esta serie la comenzó a trabajar en 2020, y es novedosa para él. “Yo hice casas con diseños de pisos de azulejos quebrados, los cuales guardé muchos años y ahora lo exploto como arte”, resaltó el creador. También, confesó que fue complejo volver algo decorativo en artístico.
Silvia Herrera, curadora y crítica de arte, expresó: “Su experimentación con este material lo ha llevado de nuevo al collage (que es parte de su repertorio) y los trozos de cerámica han cobrado el poder de proponer figuras y abstracciones. Las formas fisuradas y los contornos interrumpidos concuerdan para sugerir armonías rotas y recompuestas. El color intenso de estos azulejos, sus quiebres e irregularidades piden el descanso que conceden los fondos vacíos, especie de silencios que compensan la intensidad de su habitual paleta de color centrada en los primarios”.
El texto de sala agregó que su trabajo con pinceles y pigmentos sigue siendo el fundamento de su creación. “Los lienzos muestran muchas capas de pintura, abundantes retoques y un afán por profundizar en el amarre de las tensiones y agresiones siempre presentes en su estilo”.
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